el fundador: JULIAN AXAT
el jefe: MARIANO MAFFIA
el bicho: RODOLFO SECCO
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martes, 28 de diciembre de 2010

FELICIDADES!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

A TODOS LOS OYENTES Y LECTORES DE COLLAR DE PERLAS, MUCHAS FELICIDADES Y QUE EL PROXIMO AÑO NOS ENCUENTRE NUEVAMENTE.

martes, 21 de diciembre de 2010

Editorial 20/12/10 El orden

Formidable cena tuvimos el lunes pasado con el Sr. Negro, con postre que compartimos y todo, imagine Jefe dos cucharitas y un delicioso mousse de chocolate en el centro de la mesa…
De más está decir que nuestra pareja es una de esas feliz que se ven pocas, por ejemplo muchas cenaron rápido y sin hablar, en cambio, a nosotros se nos hizo tardísimo y no le digo que volvimos caminando de la mano bajo un cielo estrellado, porque no fue así por el cansancio claro…
De todo lo que hablamos no le voy a contar porque a quién le interesa, no?
Sin embargo convencidos que vivimos en gran desorden, hablamos del orden, esa palabrita que está en tela de juicio hoy por hoy, me refiero a si es de derecha o de izquierda, sí algo muy loco como dicen los chicos…
Bueno al otro día repase aquella cosa y recordé inmediatamente el orden en el que crecí, sobretodo en aquél con el que vivamos en casa con el paterfamilia, esto es: el abuelo, ni siquiera daba una orden, el decía el pán… y alguien iba a la panadería, está la comida… y nos sentábamos a comer… me preguntaba si esto me habrá dejado alguna secuela y la verdad es que sin duda la psicología encontraría alguna, pero no me arrepiento de haberme desarrollado con ese orden, no recuerdo sufrimiento alguno…
Hasta la poesía recordada en una columna por psicólogo, decía que la autoridad es como un tutor que apuntala el crecimiento de una planta, un faro que ofrece referencia a los navegantes… fue quien escribió que nadie eliminaría las rayas de cal que delimitan una cancha de fútbol porque “reprimen” la creatividad de los jugadores… porque si muere la autoridad de la línea de cal muere dicho deporte…
Hubo a lo largo de toda nuestra historia diferentes formas de ejercicio de autoridad, pero la que se percibe en estos días no es sobre ese sentido, sino que se tiende a suprimir la autoridad… para qué sirve?
Y lo grave es que se pretende su supresión autoritariamente, generando una gran confusión.
Mucha autoridad no significa autoritarismo, son cosas diferentes, la primera es la poesía mencionada ut supra, el autoritarismo es violencia, y no porque se grite o porque genere miedo, sino que se pretende instaurar un orden absolutista tratando de suprimir al resto.
Por eso no al abuso y al desamor, nunca sentí semejante cosa en casa, tampoco quienes no fueron autorizados a festejar el campeonato mundial de 1978, pero sí es cierto que cuando se es padre o madre, o dirigente en el CECIM, o Presidente de la Nación, es inevitable ser el dueño de la batuta, para que cada uno toque su instrumento en plenitud y libertada, de dicha forma… la sinfonía sonará de la mejor manera y para felicidad de todos…
Y por sobre todas las cosas, cuando la autoridad es simplemente hacer cumplir la ley, aquella que se discute en el Congreso y no se discute cuando la autoridad dice que esto o aquello está prohibido…
No puedo dejar de decirle que hace minutos fui interrumpido por quienes hoy están al aire, un Negro triste con fallo inédito (para él) de la CSJ de la Nación y un Jefe arruinado por deporte, que olvida aquello de mente sana en cuerpo sano, les deseo Felices Fiestas a todos incluídos nuestros queridos oyentes…
Y una novedad, el grupo Coldplay, que no es un grupo de rock, tiene nuevo disco, es algo conceptual que se supone es algo personal… dijo su líder y todos los presentes no entendía bien, hasta el resto de los integrantes de la banda no entendían de que se trataba… Abrazos, Besos y good show…
RODOLFO CASO PIPARO.


Lecturas de verano: releo a Nino y Un país al margen de la ley… voy a mechar con el hijo de Tato y su Comedia Kirchnerista en Nueva York, y terminar Los Detectives Salvajes de Julián Axat.
Mejor programa de Collar: Todosssssssssssssssssssssssssssssssssss aunque nunca olvidaré al profesor Lido.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

MATCHBOOK ROMANCE



MONSTRUOS (Matchbook Romance)

Niña, ¿qué pasa entre tú y yo?
Mira justo a través de mi
y dejate ir
No puedo ayudar más a este sentimiento
No iré a ningun lugar
pero tal vez me verás

Nosotros somos
Nosotros somos las sacudidas
Somos los monstruos
Debajo de tu cama
yeah EST
Cree en lo que lees
Nosotros estamos
Nosotros estamos equivocados
Nosotros somos las voces
Dentro de tu cabeza
yeah
Cree en lo que ves

Esto no vino sorpresivamente
vos me volviste a la vida
Creeme
sangrás por mi
Yo sangraré por vos
Te atrapé caminado por las paredes
Ahogada con aplausos
De el mundo que me vuelve loco

EST

Somos los monstruos
Somos los monstruos
Somos los monstruos
yeah yeah yeah yeah yeah

MONSTERS

Girl, what's come between you and me?
look right through me
i'll let it go
i can't help this feeling anymore
i won't go anywhere
maybe you'll see me

we are
we are the shaken
we are the monsters
underneath your bed
yeah EST
believe what you read
we are
we are mistaken
we are the voices
inside your head
yeah
believe what you see

it came as no surprise
you bring me back to life
believe me
you bleed for me
i'll bleed for you
i caught you walking through walls
drowned with applause
from the world that makes me crazy

poesías de LEONIDAS LAMBORGHINI


El jardín de los poetas

Parterre 14

Poetas soñando su poema
------antes de examinar la lente de un microscopio.
Poetas soñando su poema
después de introducir su mano
en el bolsillo izquierdo de su pantalón.
Poetas soñando su poema
en el momento mismo de saborear
la goma de una estampilla.
Poetas soñando su poema
------poco antes de examinar la lente de un microscopio.
Poetas soñando su poema
------mientras saborean la goma de una estampilla.
Poetas soñando su poema mientras introducen su mano
en el bolsillo izquierdo de su pantalón.
Poetas soñando su poema
poco antes de saborear
la goma de una estampilla.
Poetas soñando su poema
en el momento mismo de examinar
la lente de un microscopio.
Poetas soñando su poema
mucho después de introducir su mano
en el bolsillo izquierdo de su pantalón.
Poetas soñando su poema
mucho antes de saborear
la goma de una estampilla.

Parterre I6

Poetas casi nada nerviosos a la espera
------de la inspiración de su Musa.
Poetas esperando con los nervios en punta
------la inspiración de su Musa.
Poetas que esperan con los nervios algo en punta
------la inspiración de su Musa.

Parterre 17

Poetas absolutamente en calma esperando
------la inspiración de su Musa.
Poetas no muy calmados esperando
------la inspiración de su Musa.
Poetas esperando absortos la inspiración de su Musa.

Parterre 18

Poetas en absoluto absortos en la espera
de la inspiración de su Musa.
Poetas ilusionados en la espera
------de la inspiración de su Musa.

dos poesías de OSVALDO LAMBORGHINI


Envuelto en una paz apocalíptica

Envuelto en una paz apocalíptica
el tipo miraba la cocina,
las hornallas, el fuego encendido:
la cocina, empapelada ciertamente
con hojas o páginas
de diarios y revistas.
El no había merecido la estrella de la mañana,
eso es claro, y no era (ni siquiera)
el primogénito de la muerte.
La vida pasaba como un lago.
Las orillas tensas, el centro mudo.
Agua ciega, pobre y cerrada.

Aquel que ayer no más decía
tomaba mate ahora eternamente
y leía novelas de vampiros.
Televisión y fármacos: la perfección
quedó en anhelo.
Renacerá el amor con la próxima guerra.
Y en un entonces sin entonces,
como un Dios pifio que siempre tarda,
entonces se apoyará en sus muletas
y abrirá el pico como una gaviota
y derribará las puertas del paraíso,
antesala del infierno.


Mi tema es la matanza

Mi tema es la matanza
es claro: la matanza,
y no importa
nada y para nada
a qué muerte me refiero
ni de qué
muertos hablo, menos aún
si la guerra como efecto de la matanza
o a la inversa (estas minucias,
no tengo tiempo).
Pienso en mi mirada.
En qué campo de batalla nacieron mis ojos
y allí se estrenaron
para ver así,
y mirar de otro modo.
Como si hubiera modos.
Mentira es la palabra.

La palabra mentira,
¿por qué no enredarnos?

Editorial 8/11/10 Los rugbiers

Se fueron estos pibes, menos mal, con el calor que hacía acá adentro… habría que preguntarle a Mariano por qué no se dedica a entrenar hockey femenino, entonces sí sería otra cosa… la pecera llena de chicas en polleritas… bueno, bueno, una broma… que grande sus chicos Marianito… y ese que tocaba la guitarra, armónica, con capucha y todo un fenómeno…
Bien analizando el cuento de Búsico, ah! y todos mandaron saludos a sus chicas… claro que están en pleno despertar sexual y nosotros… bueno mejor este tema a quien le interesa? Pero ellos… futuros Berlusconi ...mejor mujeres que gay… dijo el premier… un fenómeno, parece la Roma Imperial y no Italia ya… y nada más sugerente que llamarse Silvio, aunque sin discriminar ni nada parecido a ello.
Ahora bien, el fundador de Collar estuvo el jueves pasado en el Centro Cultural Islas Malvinas presentando la nueva obra de Los Detectives Salvajes titulada “Si Hamlet duda, le daremos muerte” pobre libro, porque llevaron una “guillotina” y no de utilería, quisiera saber de dónde la sacaron, pero allí estaba… realmente daba miedo, estos muchachos no están bien me parece…
Reparen en lo que dijo uno de los críticos asistentes… Fernando Alfón…
Ayer asistí a un acto donde se guillotinó un libro. La cuchilla, por su peso, parecía haberse desplomado con el desinterés que le da la contundencia. Conservo un pedazo del libro ejecutado. Escribo este testimonio asaltado, aún, por la fascinación y el asombro. No recuerdo haber presenciado un acto público semejante. Sé que en la Argentina se quemaron libros y otros se enterraron, pero de eso ya hace tiempo. Sé de libros perdidos, y otros no leídos, que es una de las alternativas de la muerte. La guillotina es otra cosa: se trata de un símbolo. La muerte mera, sin más, parece menos definitiva que la muerte a guillotina. Como todo acto simbólico, pretende decirnos algo. ¿Qué fue lo que pretendió éste?
Uno de los guillotinadores… nuestro fundador Julián Axat …aseguró tener unos candidatos más para el decápite… en su discurso llegó al corazón del problema: los padres… porque cuando se habla de literatura a estos se los denomina “influencias”….
Otro de los invitados a leer poemas fue Pablo Odhe quien previamente dijo que “cuando uno escribe está solo”, luego le correspondió a Inés Aprea que pretendió contradecirlo y le retrucó …uno siempre está con otros…
A esta altura… entre grandes y chicos no había diferencia… la confusión era inmensa… la sala colmada se preguntaba de qué hablaban o qué fumaban…
Allí apareció nuevamente el fundador, el crítico escribió en su columna que Julián intuyó inmediatamente el horizonte filosófico del asunto -y olió rápido la polémica- (algo que a él poco le interesa) y agregó con esa vehemencia que lo caracteriza “UNO SIEMPRE ES UN OTRO”…
Reparen en lo tremendo del asunto… la guillotina mata a otro que nos da vida… o a otro que inventamos… o Julián que mata a otro a partir del cual somos uno mismo…
Puede pensarse que la gente comenzaba a retirarse pero no… nadie entendía y nadie quería tirar la primera piedra… qué iban a pensar los demás, que no entendía nada, no voy a demostrarles semejante cosa…
Y todo por la guillotina que lo que siempre quiso ella y quien daba la orden, fue terminar con un hombre, más que con la vida… estimo por otra parte, sin que lo tomen a mal, con todo respeto, háganse ver muchachos, no maten a nadie… es solo un libro y no es poca cosa..
Si ya se… hay que interpretar correctamente y yo… que quieren que les diga… no puedo…
Vamos a lo nuestro, la invitada de hoy, si es que mis compañeros no cambiaron a última hora, o sea, diez minutos atrás…
No se puede dejar de lado a quien escribió “Las edades de lulú” libro y película recomendada desde este sitio, para la menores de 14 que entrena Marianito…
Esta escritora española nacida en Madrid en 1960 que se quedó pensando en lo que dijo Antonio Machado acerca que “una de las dos Españas ha de helarte el corazón” y para ella fue un gran disparador, más que suficiente para que Almudena Grandes nos deje una gran obra…
Y una última exigencia desde la editorial, Sr. Negro cuente un poco del Cocodrilo de Felisberto Hernández, que no solo es ese cuento sino otros del mismo autor donde priman los recuerdos, pero usted con esas lágrimas que vende el concertista que quiero creer es el mismísimo don Felisberto, tiene una verdadera perla para todos nosotros…


EL…
ESTA ENTRE NOSOTROS…
SI, AQUÍ EN LA PECERA

jueves, 11 de noviembre de 2010

Invictus

martes, 19 de octubre de 2010

editorial del 18/10/10

A vos mozo esperame esta noche… sí vos chiquito, de la parrilla voy para el bodegón ese me escuchas… vos ya sabés quién te habla… así le voy a decir al aire… queda mal…?
Ah estamos al aire…? perdón, perdón…
A las madres un beso de aquellos, a todas… ayer fue su día y Collar siempre las recuerda, felicitaciones… y desde aquí también besos para Matilda Axat…
El último invitado fue el loco Ciacia aquél recordado wing del 62, de Gimnasia claro, el de hoy también es de Gimnasia Viscarra, este programa es del Lobo!
Aunque este Viscarra se llama Victor Hugo y es boliviano… un borrachito de Evo… sí el Bukowski boliviano le decían y tengo un material que se titula “Confieso que he bebido”… a prepararse… y nuestro amigo el Negro hoy les hablará en Coba ya verán que idioma nuevo nos trae… Marianito y quien habla nos animamos también, es español…
Pero hoy nos equivocamos… como no invitar un escritor de allí cerca y hablar de Chi, chi, chi, le, le, le por supuesto… si todo el mundo habló de los mineros, hasta salió el 11 dos o tres veces, aviso que en la jerga quinielera el 11 es el minero… y si no me creen llamen al cónyuge de Orfilia… y el 33 no podía fallar.
Algo vamos a decir… como no, si acaparó la atención de todo el mundo y con seguridad será motivo de literatura, cine y vaya a saber uno cuántas cosas más…
Lo cierto fue que… Ah! no me olvido de vos pibito… sí vos mocito, chiquitín, voy para allá eh!
Cerrarle la puerta a un hombre grande… con perro… que te crees que sos pibe…
No hay como la parrilla del Negro, la conoces a la moza, que vas a conocer… bobo!
Hablaba de Chile… como todos sabemos ya pasó el rescate, terminó todo… no… ya nos refrescaran los medios, quién sino…! de vez en cuando que una vez ocurrió un desmoronamiento a raíz del cual 33 mineros quedaron encerrados 69 días a cerca de 700 metros de profundidad y finalmente de a uno los fueron rescatando…
Y allí aparecieron sus historias, sin embargo entre ellos hubo algunas que por ahora sorprenden más que otros, aunque dentro de poco tiempo y quizá con un poco de ficción nos atrapen otras…
La de Franklin Lobos (la tomo por el apellido)… le decían “Mortero mágico” y llegó a ser jugador de la Selección chilena y vaya coincidencia uno de los rescatistas que bajaron a buscarlos fue Manuel González Pavez ex jugador de Deportivo O’higgins que llegó a jugar en 1985 un partido que los vió enfrentados… y cuando salió tuvo ganas de hacer jueguito… todo un mago.
Ahora… el mejor fue el doctor… quien por sus conocimientos en primeros auxilios, ejerció como médico del grupo… se llama Jhony Barrios… toda una novela titulada “Las dos mujeres del doctor”… fue así: la esposa del yileno de mierda… Marta Salinas con la que lleva 28 años casada, decidió no ir al rescate después de enterarse que Jhony había invitado a su “amante”…
“Estoy contenta porque se salvó, es un milagro de Dios, pero yo no iré a ver el rescate. El me lo pidió, pero resulta que también invitó a la otra señora y yo tengo decencia. La cosa es clara: ella o yo” dijo una Marta irritada frente a la prensa de todo el mundo…
Los trapos sucios se lavan en casa señora… que tanto lío, cuál es el problema del compañero…
Eso si, esposa y amante mantuvieron una gran discusión y no por Jhony sino por quién debía guardar los 9.800 dólares que el excéntrico millonario Leonardo Farkas regaló a cada uno de los mineros, finalmente los guardó Marta irritada, como siempre… al tiempo que sostenía: con la plata noooo….!
Y cuando el yileno de mierda… asomó la superficie y le notificaron la medida… se fundió en un apasionado abrazo con Susana, le aplicó dos besos y le susurró con amor… que se los meta en el… eh, eh, gritaban los rescatistas y figuretti atento por supuesto…
Te queda poco pibe, termina el programa, como con mis amigos y te veo Bobooooo!

martes, 12 de octubre de 2010

Nick Cave: "Cava Lázaro"



"Cava, Lázaro, Cava!!!"

¡Cávate, Lázaro! ¡Cávate, Lázaro! EST
¡Cávate, Lázaro! ¡Cávate de vuelta a ese agujero!

Larry hizo su nido en las ramas del otoño
construido a partir de nada más que grandes esperanzas y aire delgado
él recogió a unas madres reventadas por bebés
ellas corrieron el riesgo
y por un tiempo vivieron bastante felices allí arriba
él venía de la ciudad de New York, amigo
pero no pudo llevarle el ritmo
pensó que era como un parque de diversiones
entonces se fué a San Francisco
pasó un año en el espacio exterior
con una dulce niña de San Francisco
Puedo oír a mi madre sollozando
y muchas sillas arrastrándose
no sé lo que Es, ¡pero definitivamente algo está pasando arriba!

EST
(¡Quiero que caves!)

Bueno si, la ciudad de New York, él tuvo que salir de allí
y San Francisco, no lo sé, y entonces hacia Los Angeles, donde estuvo casi un día
él pensó que hasta los pálidos cielos estrellados
eran lo suficientemente listos para mantenerse alejados de Los Angeles
mientras tanto, Larry inventó nombres para las damas
como la Señorita Boo y la Señorita Rápida
él apiló armas y disparaba al aire a mansalva
él se deleitaba con sus adorables cuerpos como un lunático
y se cobijaba con su suave pelo amarillo
Puedo oír cánticos y conjuros y algún tipo me está mencionando en sus plegarias
bueno, no sé lo que es ¡pero definitivamente algo está pasando arriba!

EST
(¡Quiero que caves!)

Bueno, la ciudad de New York, amigo
San Francisco, Los Angeles, no lo sé
pero Larry se volvió progresivamente más neurótico y obsceno
quiero decir, él nunca pidió ser levantado de la tumba
quiero decir, ¡nadie le pidió que abandonara sus sueños!
de todas maneras, para acortar esta historia
la fama finalmente lo encontró
los espejos se convirtieron en sus torturadores
las cámaras lo capturaban en toda oportunidad
las mujeres volvieron a sus hogares con sus esposos
con sonrisas secretas en las esquinas de sus bocas
él terminó como muchos de ellos lo hacen
de vuelta en las calles de la ciudad de New York
en una fila para sopa, un adicto, un esclavo
entonces la prisión, después el manicomio, después la tumba
¡oh pobre Larry!
Pero ¿qué sabemos realmente acerca de los muertos
y a quién le importa en realidad?
bueno, no sé lo que es
¡pero definitivamente algo está pasando arriba!

EST
¡Quiero que caves!)

DIG YOURSELF LAZARUS

Dig yourself, Lazarus Dig yourself, Lazarus
Dig yourself, Lazarus
Dig yourself back in that hole

Larry made his nest up in the autumn branches
Built from nothing but high hopes and thin air
Collected up some baby blasted mothers
They took their chances and for a while
They lived quite happily up there

He came from New York City, man
But he couldn't take the pace
He thought it was like a dog eat dog world
Then he went to San Francisco, spent a year in outer space
With a sweet little San Franciscan girl

I can hear my mother wailing
And a whole lot of scraping of chairs
I don't know what it is
But there's definitely something going on upstairs

Dig yourself, Lazarus
Dig yourself, Lazarus
Dig yourself, Lazarus
Dig yourself back in that hole
(I want you to dig, I want you to dig, I want you to dig)
-----
Meanwhile Larry made up names for the ladies
Like Ms. Boo and Ms. Quick
He stockpiled weapons and took pot shots in the air
He feasted on their lovely bodies like a lunatic
And wrapped himself up in their soft yellow hair

I can hear chants and incantations
And some guy is mentioning me in his prayers
Well, I don't know what it is
But there's definitely something going on upstairs

Dig yourself, Lazarus
Dig yourself, Lazarus
Dig yourself, Lazarus
Dig yourself back in that hole
(I want you to dig, I want you to dig, I want you to dig)

Well, New York City, man
San Francisco, L.A., I don't know
But Larry grew increasing neurotic and obscene
I mean, he, he never asked to be raised up from the tomb
I mean, no one ever actually asked him to forsake his dreams
-----
He ended up like so many of 'em do
Back in the streets of New York City
In a soup queue, a dope fiend, a slave
Then prison, then the mad house
Then the grave, oh, poor Larry

But what do we really know of the dead
And who actually cares?
Well, I don't know what it is
But there's definitely something going on upstairs

Dig yourself, Lazarus
Dig yourself, Lazarus
Dig yourself, Lazarus
Dig yourself back in that hole
(I want you to dig)

dos poesías de DYLAN THOMAS

CUANDO DE PRONTO LOS CERROJOS DEL CREPÚSCULO

Cuando de pronto los cerrojos del crepúsculo
ya no encerraron el largo gusano de mi dedo
ni maldijeron al mar enroscado en mi puño,
la boca del tiempo sorbió como una esponja
el ácido lechoso en cada gozne
y se tragó los líquidos del pecho hasta secarlo.

Cuando el mar de galaxia fue sorbido
y liberado todo el lecho seco del mar,
envié a mi criatura para explorar el globo,
el mismo globo de pelos y osamenta
que cosido a mí mismo por mi mente y mis nervios,
mi frasco de materia ligara a su costilla.

Mis fusibles calcularon el tiempo para impulsar su corazón,
él estalló, hecho polvo, hacia la luz
y celebró con el sol un pequeño sabático,
pero cuando los astros asumiendo su forma
dibujaron las briznas del sueño en sus ojos,
ahogó dentro de un sueño las magias de su padre.

Todo surgió armado de la tumba
el cáncer pelirrojo, vivo aún,
los ojos velados de cataratas con sus turbios tejidos;
algunos muertos deshicieron sus quijadas tupidas,
y hubo bolsas de sangre que soltaron sus moscas;
él supo de memoria el sendero de cruces funerarias.

El sueño navega las mareas del tiempo;
el áspero sargazo de la tumba
entrega a sus muertos en este mar tan laborioso;
y el sueño mudo rueda por los lechos
donde las sombras comen el alimento de los peces
y a través de las flores, emergen hacia el cielo.

Cuando de pronto giraron las tuercas del crepúsculo,
y la leche materna fue dura como arena,
envié a mi propio embajador hacia la luz;
por truco o por azar él se durmió
y por arte de magia se armó de una osamenta
para robarme los fluidos en su corazón.

Despierta, mi durmiente, hacia el sol,
trabajador en la mañana pueblerina
y deja a este soñoliento en el sitio en que yace;
han caído los cercos de la luz,
sólo quedan en pie los jinetes más diestros,
y hay mundos que cuelgan de los árboles.

DONDE UNA VEZ LAS AGUAS DE TU ROSTRO

Donde una vez las aguas de tu rostro
giraron impulsadas por mis hélices, sopla tu áspero fantasma,
los muertos alzan la mirada;
donde un día asomaron el pelo los tritones
a través de tu hielo, el viento áspero navega
por la sal, la raíz, las huevas de los peces.

Donde una vez tus verdes nudos hundieron su atadura
en el cordón de la marea, allí camina ahora
el vegetal destejedor,
con tijeras filosas, empuñando el cuchillo
para cortar los canales en su origen
y derribar los frutos empapados.

Invisibles, tus mareas medidoras del tiempo
irrumpen en las camas galantes de las algas;
el alga del amor se vuelve mustia;
allí en torno a tus piedras
sombras de niños van, que desde su vacío
lloran ante el mar colmado de delfines.

Secos como la tumba, tus coloreados párpados
no serán aherrojados mientras la magia se deslice
sabia sobre el cielo y la tierra;
habrá corales en tus lechos,
habrá serpientes en tus mareas,
hasta que mueran todos nuestros juramentos del mar

La reacción- un cuento de Fabián Casas

A los 17 años entré en la Federación Juvenil Comunista. Mi jefe de círculo era Fabián Polosecki, quien muchos años después crearía un programa llamado El otro lado, que sería, involuntariamente, parodiado por Gastón Pauls. La historia se repite dos veces, primero como tragedia y después como parodia, decía Carlos Marx. Polosecki terminó tirándose debajo del tren que va para Tigre. Pero no es sólo esto lo que quería contar...

Una noche, Polosecki nos dio a todos los que formábamos parte de su grupo, el carnet del PC. Lo recuerdo perfectamente: era rojo, tenía la forma de una libreta de enrolamiento y decía en una de las primeras hojas: "No dejes que este carnet caiga en manos de la reacción". La reacción. Me guardé el carnet en el bolsillo y, mientras volvía en subte hacia mi casa -donde vivía con mis viejos-, me puse a pensar qué querría decir "la reacción". Conocía el verbo reaccionar. Podía decir que un equipo reaccionó a tiempo y le inclinó la cancha a otro. Pero algo me decía que no se trataba de eso. Una de esas noches, después de otra reunión de la Fede, volví a mi casa muy tarde y me encontré a mi viejo en mi pieza, sentado en mi cama, delante del póster de Invisible, con mi carnet rojo en la mano. El tipo estaba enojado y me quería matar. Me dijo que los militares nos podían liquidar a todos si se enteraban que alguien de la familia estaba en el PC. Y que la política era peligrosa. Así que mi viejo era la reacción. Más claro, echale agua: no dejes que este carnet caiga en manos de la reacción. Tarde.

Entre mis 17 y 20 años tuve serios enfrentamientos con mis viejos. En ese entonces mis ídolos eran los rockeros que escuchaba en un Winco blanco: Manal, Spinetta, Sui Generis, Los Gatos, Moris... De manera ingenua, asimilaba esa música con la revolución. Me vestía como se vestían los rockeros: vaqueros, sacos con pañuelos y remeras desteñidas, toppers negras. La frase de la canción de Dylan, que había traducido, reflejaba lo que yo pensaba: "Tengo mi cabeza llena de ideas y acá me obligan a lavar el piso, en la granja de Maggie no trabajo nunca más".

Cuando empecé a fumar porro, me tuve que ir del PC. Ningún revolucionario puede hacer la revolución si está tomando drogas, a menos que la revolución parezca venir en pasta negra, con Sargent Pepper o Blonde on Blonde. Hoy creo que siempre se ha intentado unir ciertas cosas que claramente son antagónicas. En ese momento, la pelea entre rockeros y chetos era notable y clara. O los mods y los rockers en Gran Bretaña. Pero después las cosas cambian y no todo es lo que parece. Conceptos tranquilizadores como derecha e izquierda, empiezan a mutar hasta volverse inservibles. Pero por ahora conservémoslos. Aunque la palabra reacción ha ido cambiando, como una luz de giro, hasta llegar a denominar a personas que jamás hubiera pensado como reaccionarias.

Hace poco leí una nota donde un crítico teorizaba que Bob Dylan -según lo infería de las Crónicas que el cantante acababa de publicar- era de derecha. Realmente no me sorprendió. La mayoría de los grandes artistas son de derecha. Mejor dicho, la derecha parece escribir (o pintar, o componer) mejor que la izquierda. T.S. Eliot, misógino, homosexual reprimido, monárquico, antisemita, escribió uno de los grandes poemas de todos los tiempos: The Waste Land. Ezra Pound terminó jugando a un tenis imaginario en su cárcel de Pisa para mantener el estado atlético. Y de paso escribía los increíbles Cantos Pisanos. ¿Qué hacía ahí? Estaba detenido acusado de traición a la patria, por apoyar a Mussolini. En la letra de Desolation Row, Dylan los hace pelear entre sí en la cubierta del Titanic.

James Joyce pensaba que la segunda guerra mundial era una mierda porque impedía la expansión de la influencia del Ulises. Francamente un artista es alguien en el que no se puede confiar. Su arte está por encima de todo y el cambio radical de una sociedad debe venir por el genio colectivo y no por la recalcitrante individualidad de esta gente. Sin embargo, cuando se vuelven seres sensibles, de izquierda, escriben bodrios como, por ejemplo, El Libro de Manuel, de Cortázar. El mejor Cortázar, sin duda, era el muchacho de derecha que se fue del país porque la casa estaba tomada por los parlantes que transmitían los discursos de Eva Perón. Acá el concepto de reacción se vuelve paradójico. La derecha expulsaba a la derecha. Pero hay una vuelta más. Muchos han querido ver a Arthur Rimbaud peleando en la comuna de París. Rimbaud, que escribió que "hay que cambiar la vida", y que propagó "el desorden de los sentidos", en realidad terminó como un autista, solo, en el desierto africano amarrocando oro para comprar nada. Pero su mensaje llegó, el desorden de los sentidos es el que pone en camino al personaje de Jack Kerouac en On The Road. Este libro iniciático lanzó a generaciones de jóvenes a las rutas del mundo. Ernesto Guevara hizo lo mismo, pero él, a diferencia de Kerouac y al igual que Buda, se dio cuenta de la miseria y el dolor y terminó tomando las armas. ¿Saben qué hubiera hecho Guevara ya convertido en comandante con alguien que le proponía el desorden de los sentidos? Lo hubiera fusilado. Lo mismo que hacen esos granjeros con los dos motociclistas de Busco mi destino.

Guevara -ícono de la imaginación al poder en el 68- escribió la contra cara de On The Road: Los diarios del Che en Bolivia. Una autobiografía kafkiana -y genial en términos literarios- de un hombre encerrado en un páramo estéril. Este libro es la distopía de la gloriosa juventud que se lanzó a cambiar el mundo. Este libro es mucho más contradictorio y antirrevolucionario -si lo vemos en términos pedagógicos de izquierda- que Paradiso, del Proust del Caribe. Por suerte, las obras de los artistas superan a los artistas, se vuelven impredecibles hasta para los mismos ejecutantes. En la repetición, regresan como una voz extranjera.

De todas formas, nos gusta vivir en el engaño. Creemos que el de un stone arrojando un televisor desde un balcón es un gesto de transgresión. Madonna nos parece una mujer que ha llegado para destruir todos los moldes conservadores. Nos parece que ella es la propia arquitecta de su guión personal. Pero en realidad sólo está representando un lugar común que no intranquiliza a nadie. Madonna es como Zoolander, un histérico obsesionado por cómo va a ser mirado.

La verdadera contracultura, o cómo se llame, que está sucediendo ahora mismo, es invisible. Cuando se hace visible, deja de existir. ¿Y qué voy a hacer con aquel póster de Invisible? Luis Alberto Spinetta (aquel pescado rabioso que escribió el famoso manifiesto rock duro música suicidada por la sociedad) que toca en la Casa Rosada (cuna del poder real) y en el Hotel Faena (cuna del poder virtual). Spinetta, uno de los músicos a los que podríamos llamar geniales, es, en realidad, un padre de familia glamoroso, que se considera "un dios", según lo dijo en un reciente reportaje. Tal vez esta disociación que nos obliga a hacer un músico o un escritor cuando lo escuchamos decir estupideces, podría servirnos para ver las cosas más claras. Impulsados por cierta ingenuo optimismo, hemos pensado que alguien que escribía "Los Libros de la buena memoria" tenía que ser un estadista preclaro a la hora de abrir la boca con, por ejemplo, el caso Cromañón. Pero el reciente reportaje a Spinetta en Página 12, no deja dudas: Spinetta es un pensador de derecha, mediocre, que, a la hora de componer, la rompe. ¿O es de izquierda? Cuando dice que: "Las masas van a ver ciertas bandas que responden al poder popular hirviente, con música sometida al hervor, caldeada por el hervor popular, que es como una especie de piquete inoperante de la expresión rockera", ¿qué está diciendo? La palabra piquete usada despectivamente -tan cara a los taxistas más fachos- está en boca de un artista notable. Lo cierto es que en la Casa Rosada y en el Hotel Faena, es imposible que alguien pierda la vida en un concierto de rock. Los muertos vivos, en cambio, parecen estar en el escenario.

Creo que se podría escribir mucho sobre el lugar que ocupan las piezas de los adolescentes en la arquitectura familiar. La pieza de mi primo, por ejemplo, era un lugar notable para mí. El era de la JP, era pintor y su pieza solía estar repleta de discos de los Beatles, Comics de Hugo Pratt y libros sobre Giacometti, Picasso y Pollock. También, en cierto momento, había bombas caseras. De alguna manera él era el vector que filtraba en mi casa paterna la efervescencia de los setenta. Con el tiempo, fue perseguido y golpeado, tanto por sus "Compañeros", como por la dictadura. Walter Benjamin contaba que los hombres que habían visto el horror de la guerra, volvían silenciosos porque no tenían nada para contar, habían perdido la experiencia. Mi primo, que pensaba que estaba cerca de la revolución, tuvo que perder.y se volvió un ser silencioso, un Rain Man. Y abandonó el arte y la política, por igual. Alguien le hizo Scratch a su vida y después de eso el disco ya no corrió igual. Algo similar le pasa al Motociclista de Rumble Fish, ese extraordinario poema de Francis Ford Coppola. A pesar de que Rusty James -su hermano- vive pendiente de él y le exige que vuelva a comandar las pandillas, éste se niega y se muestra desencantado con su pasado. "La droga mató a las pandillas", le dice. Y le agrega: "Para llevar gente hacia algún lado, primero hay que saber adónde ir". Y el motociclista es un poeta en estado terminal: cansado de las respuestas, ahora parece moverse en estado de pregunta. Esa incertidumbre tan difícil de soportar. Los que saben a dónde ir, no dudan.

Los que tienen que gobernar, no se pueden permitir el lujo de no saber qué hacer. Gran parte de las obras que me interesan están infectadas por el riesgo y la incertidumbre. Su hermano, que no ha logrado construir su propia individualidad y vive pendiente de lo que hizo El Motociclista en el pasado, se parece mucho a ese público estéril que vive esclavizado por el humor del artista. Para que el hermano resucite, El Motociclista se tiene que sacrificar. En este punto, volvamos a Spinetta. "Me parece que la gente no sabe respetar a sus dioses", dijo el músico en la mentada entrevista. Los dioses a los que aludía, claro, eran él y el parnaso rockero local. Si sólo tenemos vidas que intentan durar en el sentido más literal. Vidas suburbanas, insulares, fustigadas por la publicidad, por lo que se debe decir y vestir y sin una pisca de originalidad, estamos condenados, entonces, a vivir el fantasma de los demás: es decir, a construirnos sólo en lo que nos reflejan Spinetta, Maradona y otros célebres. Porque el mundo está parcelado en determinados campeonatos que siempre ganan otros. ¿Quién habrá inventado toda esta mierda? Me viene a la mente , ahora, ese momento de la película La caída, cuando una mujer muy joven se tira encima de Hitler y le dice: "Por favor, Führer, no nos deje caer, sin usted no somos nada. Díganos qué tenemos que hacer".

La gente mira televisión mientras prepara la cena de la noche y espera que alguien le diga qué es lo que tiene que hacer. Los primeros cazadores humanos vivían presionados por la obligatoria vigilia a la que lo sometía la presencia de los grandes depredadores. Esto no ha cambiado. Un par de tiros que se escuchen en la noche, y todos caemos en mano de la reacción.

Medio pan y un libro, Federico García Lorca

Locución de Federico García Lorca al Pueblo de Fuente de Vaqueros (Granada). Septiembre 1931.

"Cuando alguien va al teatro, a un concierto o a una fiesta de cualquier índole que sea, si la fiesta es de su agrado, recuerda inmediatamente y lamenta que las personas que él quiere no se encuentren allí. ‘Lo que le gustaría esto a mi hermana, a mi padre’, piensa, y no goza ya del espectáculo sino a través de una leve melancolía. Ésta es la melancolía que yo siento, no por la gente de mi casa, que sería pequeño y ruin, sino por todas las criaturas que por falta de medios y por desgracia suya no gozan del supremo bien de la belleza que es vida y es bondad y es serenidad y es pasión.
Por eso no tengo nunca un libro, porque regalo cuantos compro, que son infinitos, y por eso estoy aquí honrado y contento de inaugurar esta biblioteca del pueblo, la primera seguramente en toda la provincia de Granada.
No sólo de pan vive el hombre. Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan; sino que pediría medio pan y un libro. Y yo ataco desde aquí violentamente a los que solamente hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos. Bien está que todos los hombres coman, pero que todos los hombres sepan. Que gocen todos los frutos del espíritu humano porque lo contrario es convertirlos en máquinas al servicio de Estado, es convertirlos en esclavos de una terrible organización social.
Yo tengo mucha más lástima de un hombre que quiere saber y no puede, que de un hambriento. Porque un hambriento puede calmar su hambre fácilmente con un pedazo de pan o con unas frutas, pero un hombre que tiene ansia de saber y no tiene medios, sufre una terrible agonía porque son libros, libros, muchos libros los que necesita y ¿dónde están esos libros?
¡Libros! ¡Libros! Hace aquí una palabra mágica que equivale a decir: ‘amor, amor’, y que debían los pueblos pedir como piden pan o como anhelan la lluvia para sus sementeras. Cuando el insigne escritor ruso Fedor Dostoyevsky, padre de la revolución rusa mucho más que Lenin, estaba prisionero en la Siberia, alejado del mundo, entre cuatro paredes y cercado por desoladas llanuras de nieve infinita; y pedía socorro en carta a su lejana familia, sólo decía: ‘¡Enviadme libros, libros, muchos libros para que mi alma no muera!’. Tenía frío y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía agua: pedía libros, es decir, horizontes, es decir, escaleras para subir la cumbre del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural, de un cuerpo por hambre, sed o frío, dura poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida
Ya ha dicho el gran Menéndez Pidal, uno de los sabios más verdaderos de Europa, que el lema de la República debe ser: ‘Cultura’. Cultura porque sólo a través de ella se pueden resolver los problemas en que hoy se debate el pueblo lleno de fe, pero falto de luz.
Septiembre de 1931

Editorial 11/10/10 Feria de Frankfurt

El 6 de octubre comenzó la Feria editorial de Frankfurt y nuestro país es este año el invitado de honor. Es la más grande y antigua en su tipo, por eso en estos días nuestros libros estarán bajo la mirada de agentes, editores, libreros, traductores y autores de más de 100 países… allí en el centro de compra y venta de derechos más relevante de la industria editorial… que tal?
Nuestro camino hacia Alemania no estuvo exento de polémicas, es decir como siempre recorrimos el camino más sinuoso… pero ya está, quedaron atrás las discusiones tomadas para ilustrar ese enorme pabellón de 2.500 metros cuadrados dedicados al huésped de honor…
Recibimos la posta de China en 2009 y ahí estamos todavía discutiendo acerca de los íconos representativos de nuestra cultura nacional…
Ícono igual imagen o símbolo… en la cultura (todo lo que el hombre le agrega a la naturaleza) popular, por ejemplo… una persona que es reconocida por tener significación, representación o encarnación de ciertas cualidades…
Muy bien… nuestros nominados fueron… Gardel, Evita, el Che Guevara, Maradona, Borges y Cortázar… los dos últimos sí íconos literarios… los otros no. También las gigantografías… es decir impresiones de gran formato… fueron polémica debido a que “El matrimonio Furia” estaba presente en casi todas, junto con otros íconos de nuestra política… que tenían que hacer allí, si con su presencia ya bastaba?
Lo dejo a su criterio…
Lo importante hoy es que no podré estar presente… por razones obvias, perderé un año de vida que por supuesto es lo que cada uno de nosotros ganamos por cada programa… dejaré la novela más romántica de los últimos tiempos, aquella que se desarrolla en la parrilla donde cenamos todos los lunes…
Es que… nuestros oyentes todavía no se enteraron.
Lo cierto es que en el lugar la Sta. Moza hoy simpática al extremo y ya parte del programa, fue en sus inicios de enorme antipatía con estos viejitos babosos y ahora hasta nos cuenta que dejó su novio anterior por un apasionado romance con uno de los vampiros… mozos y parrillero… casi como en Bailando y nosotros hacemos de Marcelo…
Estimo también que Collar estará feliz con el nuevo Nobel de Literatura, es que don Mario escribe en nuestra lengua y su obra es una de las más importantes del mundo y más aún dijo que le daba un poco de vergüenza recibir el Nobel que no recibió nuestro Jorge Luis Borges…”
Quiero recomendarles a mis compañeros autoritarios que no pueden opinar de política en mi ausencia, repito nada de política sin mí…
Y cuando les hablé de íconos quiero recordar que también existen los iconoclastas o sea… romper imágenes… eso quiere decir… como los musulmanes que prohíben reproducir imágenes de Mahoma… les digo la verdad… me muero de ganas por ser iconoclasta y prohibir gigantografías que no nos representan como merecemos… los abrazo y besos para todos.

lunes, 11 de octubre de 2010

ON THE RADIO


This is how it works
It feels a little worse
Than when we drove our hearse
Right through that screaming crowd
While laughing up a storm
Until we were just bone
Until it got so warm
That none of us could sleep
And all the styrofoam
Began to melt away
We tried to find some words
To aid in the decay
But none of them were home
Inside their catacomb
A million ancient bees
Began to sting our knees
While we were on our knees
Praying that disease
Would leave the ones we love
And never come again
On the radio
We heard November Rain
That solo’s really long
But it’s a pretty song
We listened to it twice
‘Cause the DJ was asleep
This is how it works
You’re young until you’re not
You love until you don’t
You try until you can’t
You laugh until you cry
You cry until you laugh
And everyone must breathe
Until their dying breath
No, this is how it works
You peer inside yourself
You take the things you like
And try to love the things you took
And then you take that love you made
And stick it into some
Someone else’s heart
Pumping someone else’s blood
And walking arm in arm
You hope it don’t get harmed
But even if it does
You’ll just do it all again
And on the radio
You hear November Rain
That solo’s awful long
But it’s a good refrain
You listen to it twice
‘Cause the DJ is asleep
On the radio
(oh oh oh)
On the radio
On the radio – uh oh
On the radio – uh oh
On the radio – uh oh
On the radio


Así es como funciona.
Se siente un poco peor
que cuando conducíamos el coche fúnebre
a través de la multitud llorando,
mientras una tormenta sonreía sobre nosotros.
Antes de que fuéramos tan sólo huesos,
antes de que fuera cálido.
Ninguno de nosotros podría dormir,
y la espuma de poliestireno
empezase a derretirse.
Intentamos encontrar las palabras
para curar el declive,
pero ninguna de ellas estaba en casa.
Dentro de sus catacumbas.
Un millón de viejas abejas
comenzaron a picar nuestras rodillas,
mientras estábamos arrodillados,
rezando por que la enfermedad
saliera de aquellos a los que amamos,
y que nunca volviera.
En la radio
oímos "November Rain".
Ése sólo es realmente largo,
pero es una bonita canción.
Las escuchamos un par de veces,
porque el DJ se había quedado dormido.
Así es como funciona.
Eres jóven, hasta que dejas de serlo.
Amas, hasta que dejas de amar,
Lo intentas, hasta que no puedes más.
Te ríes hasta que acabas llorando.
Lloras hasta que te ríes.
Y todo el mundo debe respirar,
hasta que llegue su ultimo aliento.
No, así es como funciona.
Tratas de ver dentro de tí mismo.
Tomas las cosas que quieres,
e intentas amar las cosas que tomas.
Y entonces tomas ese amor que creaste,
y lo metes en alguien.
En el corazón de alguien.
Bombeando la sangre de alguien,
y caminando abrazados.
Esperas que no se haga daño,
pero aún sucediendo,
lo vuelves a repetir todo.
En la radio
oímos "November Rain".
Ése sólo es realmente largo,
pero es una bonita canción.
Las escuchamos un par de veces,
porque el DJ se había quedado dormido.
En la radio.
(oh oh oh)
En la radio…

editorial del 4/10/10

NOMBRES
Les conté el lunes acerca de mis nuevos amiguitos…, aquellos con los que juega Felipe a la mañana en la plaza de 19 y 44… son chicos divertidos, juegan a la pelota y en los juegos… nada que a uno le llame la atención a no ser por los nombres de los hermanitos Gómez…
Braian y Jhonny Gómez… Después advertí que se había incorporado un tal Jhonatán y pensé que podría ser Ferreyra… en realidad me sentí un poco incómodo… pensé en mamá y el motivo por el cual me llamó Rodolfo… creo que fue por aquél famoso Valentino y también la posibilidad de agregar al apellido el Mc y de allí en más ser Mc Secco de origen Irlandés…
Lo cierto fue que la inquietud creció y comencé a investigar… y vaya si encontré cosas interesantes…
En Uruguay que como ustedes saben durante el Mundial tuvo muy buen desempeño, ocurrió entonces que un matrimonio quiso inscribir a su hija con un nombre estridente… María Vuvuzela y hubo Celestes de todo tipo… ya tenían antecedentes debido que en el Mundial del año 50 jugaron la final con Brasil y “Dosauno” terminó siendo nombre propio.
En el País vecino son de público y notorio (el PJ me tira) los nombres extravagantes… o ridículos… es que alguien puede llamarse Repúblico, Flash, Préstamo, Teléfono, Árbol, Pacífico y hasta Artigas o Darwin…
Y existen también aunque no lo crean un nombre de pila que uno lo pronuncia y le duele todo… Hitler… y aunque no lo crean… los últimos días de agosto en Tacuarembó falleció un Hitler de 70 años que mató de un tiro a su pareja y luego se suicidó y hay otro Hitler de 71 años que vive en Rivera… su padre, policía intentó inscribir a su otro hijo con el nombre de Mussolini, por suerte la esposa no quiso saber nada y ganó la pulseada.
No todo esto tiene de particular el Uruguay… a nosotros nos pasó con los Juan Domingo o en la guerra del Negro hubo niñas que recibieron el nombre de Malvina y no por la recordada Malvina Pastorino…
Esto no aclara demasiado la cosa, porque en Ecuador viven Vick Vaporoup, Osa Mayor, Land Rover, Chispa de la Vida y hasta… Año Bisiesto y en Israel dicen que existen algunos llamados Perfecta Circuncisión…
Casi un crimen de lesa humanidad con daños colaterales… sin embargo hay más… Alí Babá, Cristo Crucificado, Amor de mi Vida, Cabildo Abierto o Cadena Perpetua… todo en un continente cuyas agendas telefónicas se parecen a un zoológico… es que también existen los Mono Gatica, Gato Lopez, Cabrito Fernández y desde la ciencia… escuchen… hay “Email” y es uruguayo… les paso el apellido, Suarez Barboza y nació antes que internet un digno compatriota de “Libre Albedrío” que también se consigue en las guías uruguayas…
Y a los padres, no se quejen porque los nombres condicionan, tengo un amigo que se lamenta constantemente debido a que su hijo Jerónimo y no con G como aquél guardavalla de mi equipo… sí Gimnasia, no lee nada de nada y es enorme de travieso, llega a decir que es malo el chico y un día hablo Freud por él y se le escapó “…este indio me tiene podrido…”
Que cosa no? Y que les puedo decir acerca de las Hebes… que bárbaro, la semana pasada me costó escucharla, sobre todo aquello que dijo “…nunca las madres fuimos tibias…” se olvidó que en silencio dieron vueltas alrededor de la pirámide de mayo, que con valor desfilaron frente a una dictadura y de aquellas madres todos estamos orgullosos…
Y ahora… a días de haber cumplido 25 años de aquella frase que un señor de saco y corbata no con uniforme, manifestó que no le pertenecía porque es de todos nosotros… dijo NUNCA MAS Hebe, el Señor… todo un símbolo de Paz y usted fuera del horario de protección al menor nos invita a tomar los tribunales, ni siquiera vale para la Corte menemista señora y para esta mucho menos… todas palabras las suyas reñidas con la ética y la paz…
Claro que usted está peleada con el Nunca Más, integra un movimiento o partido que cuando fue invitado a participar de la conadep un órgano creado precisamente para defensa de los Derechos Humanos, se negaron… sí no quisieron participar de ese admirable informe final sobre desapariciones de personas, apropiación de niños y otros delitos…
Y usted nos invita a tomar tribunales y todo por una ley de medios audiovisuales, no será porque usted quiere ser la autoridad de aplicación señora?

Un cuento de nuestro invitado: RODRIGO CARMONA

Fortunato querido

Tengo cuatro o cinco frases que ya son celebridades en el bar Decó. El azar hace justicia y trae a la memoria y a mi lengua que “el diablo sabe por diablo pero más por su endiablada diablez”. Retruécano exquisito, dirán ustedes y comparto su apreciación. ¿Y qué del neologismo último? Una gema que engarza perfecta en la joya que es la frase entera. Y están en lo cierto y si quieren confirmarlo, pregunten por Fortunato en el bar Decó. Es casi ineludible que antes de cualquier referencia oigan por boca de jarro alguna de estas muletillas que enriquecen el saber popular. Porque si hay algo que tuve en claro desde siempre, fue que mi lugar estaba ahí, con los condenados a la ignorancia, con los apartados del saber académico y diría más, de todo saber. Rincón de bebedores de vinos rancios, cueva para el pasatiempo fatuo de los naipes y el comentario mordaz sobre nimiedades como la política y el fútbol. Jamás me faltaron las ofertas de mis iguales, de los grupos vanguardistas en la diatriba filosófica de nuestro tiempo, pero así como el rocío lleva innata la conciencia del fresco matinal, yo supe que había un sitio que aguardaba mi labor de salvación, mi labor de humilde misántropo. Y elegí el bar Decó, aunque es por sobrada humildad que digo: elegí al bar Decó, ya que fueron ellos, mis compañeros de trasnoche, de cerveza alzada y compartida, quienes tuvieron la preferencia por mí.
En la casi fingida negación de la poesía como afirmación de lo poético, recuerdo que asesoré a uno de los empleados del bar Decó, una noche en que el infortunado sufría el torrencial drama de sus amores y la oprobiosa inestabilidad de portar nuevos cuernos. Se había enterado aquella tarde de la visita asidua que su mujer hacía al fortachón bicicletero de la calle Nueva York, y había decidido, así como así, matarla ni bien cayera sobre el día la noche, y con sus propias manos. Fortunato, a tu juego te llamaron, me dije y le quité al despechado de un plumazo la locura en mente y por supuesto, el sinfín de problemas judiciales futuros. Vacié medio litro de cerveza en el morro de su cornamenta y le aconsejé, al tiempo que me gritaba: idiota y lloraba, la humillación como excelsa figura del castigo a la viperina mujer. Andá, enfrentala. Decile que lo sabés todo y que sos demasiado para ella, le dije. Pero el difamado flaqueó de cuerpo entero y me contestó que así como había pensado en matarla, también quería exigirle pidiera perdón y perdonarla.
Testigo de esto, uno solo: Anselmo Garat, dueño y cantinero del bar Decó. Él repasaba la barra con la franela siguiendo las penas de su empleado y tal vez pensando que en el turbado testuz del ingrato no había mayor remedio ni labor, fue que me dijo: Fortunato, no le rompas las bolas. Más que pedírmelo, me suplicó, y le sirvió a él un vaso de grapa hasta la mitad.
Sabido es que el perdón viene a negar la grandeza del que se humilla y que Fortunato jamás renuncia, si de hacer el bien se trata. Me llevé al susodicho a una mesa aparte y para que no se distanciara de nuestro plan redentor, me propuse azuzarlo un poco, y lo llevé al corriente de lo que ya era un murmullo de voces en el Bar Decó. La bífida Mariel, que así se llamaba la mujer del engañado, no sólo mostraba interés en el reparador de biciclos de la calle Nueva York. También se la había visto en cierta primavera de la mano del intendente caminando por la costa, y una noche de marzo, en exultante bailongo, un morochón de Astilleros, cuando la fiesta del sindicato, la llevaba al ritmo del son con una mano en el culo, y me permití decir culo, para mayor dramatismo. Algo se decía también del vigilante de la cuadra, demasiada gomina y bigote recto para ser buena gente, y del más grande de los hijos de la vieja Lucha y de un rubiecito que venía desde La Plata en un Ford nuevo para visitarla a Mariel. Y la lista seguía pero el desdichado me pidió que le diera un descanso. Lo miró a Anselmo Garat buscando quizá la desmitificación de la mala calaña, y el otro le hizo un gesto que ya no dejaba dudas y lo derrumbó. Al día siguiente, el joven mesero amaneció flotando en la costa. En el bolsillo, una carta resumía en sus toscas palabras, el espíritu de mi consejo: Mariel: sos una hija de puta. Y eran esas palabras y su cuerpo a la deriva la imagen quizá exacerbada del humillado y fiel vencedor.
Esta anécdota ya es fama y casi que me da calor repetirla como anexo documental de por qué, cuando entro al bar Decó, a diestra y siniestra se sume en silencio. Si estuviéramos en oriente no flaquearía la metáfora del ruido del gong. Los mazos de cartas se detienen en la mesa y ya nadie puede seguir la pelea de box que transmite en directo el televisor que puso el viejo Garat en una esquina. Porque es Fortunato el que se anuncia en el chirrido de los goznes de la puerta cancel.
Hacen falta muchos kilómetros bajo la suela para transitar esa alfombra roja de admiración y respeto. Hay que saber andarse con humildad, saber el punto perfecto en que los músculos de la cara se relajan como diciendo muchachos, por favor, sigan. Y el bar Decó retoma el ritmo de la baraja y el trago, de la tos y el repetido cigarro.
Si me acerco a una mesa los muchachos se levantan para que entonces pueda estar más cómodo. Fíjense qué aguda debe ser mi presencia que de algún modo se consideran indignos de compartir una mesa conmigo. Y entonces no basta que les pida que por favor se sienten, sino que para satisfacerlos de mi encuentro, tengo que levantarme y supervisar de cerca lo que se van a conversar a otro lado, porque la timidez les impide pedirme, lisa y llanamente, el consejo que de algún modo esperan de mí.
El caso es que esta noche, Fortunato querido, ni que una carambola a tres bandas. Si lo hubiese planeado me quedaba corto. Redonda redonda, dejé una de esas enseñanzas que no se dan todos los días. Visto de afuera había una cosa como de David y Goliat. El enano Migré se me había plantado de manos, con la camisa afuera y bastante más borracho de lo que nunca lo había visto al enano Migré. Y para colmo, el pobre enano, se había perfilado con la guardia de un zurdo, cuando todos sabemos que la guardia del zurdo nació condenada a perder.
Esa noche, debo reconocer, quizá también yo estaba bebido de más. Venía boyando de mesa en mesa, procurando repartirme en proporciones iguales y evitar los recelos que comúnmente aparecen cuando me entretengo demasiado con alguno de los muchachos. Llegué a la barra y pedí otro vermut. A mi derecha el Negro Melián, a mi izquierda Juanito Lafinur. El Negro Melián le decía a Lafinur que la mano estaba jodida, y Lafinur decía que sí, que la mano estaba jodida. Entonces Melián decía que ya nadie te tiraba una soga, y Lafinur decía que no, que ya nadie te tiraba una soga. No hay derecho, decía Melián. Qué va a haber, decía Lafinur. Y la diatriba seguía entre el reproche y la queja, el llanto de un tango como a medio hacer, así que me llamé a la acción. Les dije, muchachos, el secreto está en dar, cuando uno da, siempre algo vuelve y la mayoría de las veces, vuelve con más. Melián le dijo a Lafinur: vamos. Lafinur, simplemente, dijo: rajemos, y no tuve otra chance que comenzar a hablar para retenerlos.
¿Por qué creen sino que la panadera me mostró los pechos?, les pregunté. Y reconozco que hice la pregunta demasiado fuerte, porque el bar Decó se llamó a silencio, interesado como siempre en lo que tenía para decir. Y entonces les dije que esa misma tarde había pasado por la panadería a comprar unos bizcochos para el mate, y que ahí estaba Lucía, la panadera, quejándose también de las mismas cosas que Melián y Lafinur, de la malaria de estos meses, de la suba de precios, de que habían cortado el fiado y demás. Entonces le dije, Lucía, tome, y le di cien pesos. Esto es la pura verdad y tan verdad como que Lucía no quiso tomarlos, y que yo le insistí y que ella agradeció y me prometió devolvérmelos en cuanto pudiera. Y yo le dije que por qué, mejor, no me regalaba una sonrisa. Y ella se sonrió, y es la pura verdad que se sonrío y me dijo que iba a devolvérmelos en cuanto pudiera. Pero yo, conociéndolos a los bestias del bar Decó, a la bestia de Melián, a la rata de Lafinur, no podía confiarles el sincero juramento que había en esa sonrisa de Lucía. Así fue que les dije que la panadera me aceptó los cien pesos y que se abrió la blusa, como quien abre una flor y que ahí refulgieron ante mí, esos pechos que son fama en bar Decó y en todo Berisso, la envidiable perfección de la naturaleza.
Qué decís, pelotudo, oí que alguien injuriaba a mis espaldas. Y en lugar de amilanarme, para mí fue un síntoma de la buena atención que había generado mi historia en el bar Decó. Y entonces dije que no solamente fui privilegiado testigo de las dotes esculturales de Venus, sino que además le eché mano, como nadie nunca jamás le echó mano, y esto, dije, no es opinión que surja de mí, sino de las propias palabras de la panadera Lucía que se había soltado el cabello para decirme que nunca nadie jamás la había tocado de esa manera. Entonces fue que me palmearon el hombro y ahí nació la escena de David y Goliat.
¿Cómo iba a saber yo que la panadera era la esposa del enano Migré? Venus con ese enano despreciable, que se tambaleaba ahora invitándome a la pelea y para colmo de sus males, perfilado como un zurdo. Porque aquí en el bar Decó todos miran boxeo pero pocos, yo diría que muy pocos, conocen tanto del arte púgil y de la arquitectura del cuadrilátero como yo. Así que no rehusé el convide del diminuto esperpento, y alcé los puños, como es debido, para la defensa y ataque en el box.
Lo que resta es breve, al menos en mi recuerdo. Muchos creerán que fue un descuido, otros harán sus apuestas a favor de las virtudes boxísticas del enano Migré. A los hechos me remito: al primer golpe lo ví venir, a los siguientes, los presumo, porque amanecí en una cama de terapia intermedia en el Hospital Zonal. Sé que cometo un pecado terrible si cuento los secretos ocultos en esta pelea desigual. Pero alguien debe hacerlo, y la verdad, la pura y recta verdad, es que lo dejé hacer al enano Migré, la verdad es que pudo más mi misión asignada a esta tierra, mi estrella puesta al servicio del bar Decó. Imagínense ustedes, en ese antro de la barbarie y la chabacanería, la recreación de la imagen bíblica de David y Goliat.

jueves, 29 de julio de 2010

el mercenario 15



59 ST BRIGDE SONG (Simon & Garfunkel)

Slow down, you move too fast.
You got to make the morning last.
Just kicking down the cobblestones.
Looking for fun and Feelin' Groovy.

Hello lamp post,
What cha knowin?
I've come to watch your flowers growin'.
Ain't cha got no rhymes for me?
Doot-in' doo-doo,
Feelin' Groovy.

Got no deeds to do.
Nopromises to keep.
I'm dappled and drowsy and ready to sleep.
Let the morning time drop all its petals on me.
Life, I love you,
Feelin' Groovy.

LA CANCION DEL PUENTE DE LA CALLE 59

Despacio, tranquilo, andás muy rápido.
Tenes que hacer la última mañana.
Sólo tomandotelo con calma y paciencia

Hola lámpara de correos,
¿Qué hay de nuevo?
He venido a ver tus flores crecer.
¿No tenés una rima para mí?
Doot-in 'doo-doo,
Sintiéndote bien.

No tengo que hacer cosas.
Ni cumplir las promesas
Estoy somnoliento y listo para dormir.
Deja que el tiempo de la mañana haga caer todos sus pétalos sobre mí.
Vida, Te quiero,
Groovy Feelin '.

domingo, 4 de julio de 2010

el mercenario 14



PARA EL MUNDIAL DE SUDAFRICA SE LE PIDIO A K´NAAN (músico nacido en Somalia que tuvo que escapar de la guerra con su familia y vive en Canadá) QUE ADAPTARA ESTA CANCION. LA VERSION CON LA LETRA ORIGINAL ES LA UE VEMOS EN EL VIDEO Y LA QUE ESTA COPIADA A CONTINUACION

WAVING FLAG (K´NAAN)

when i get older i will be
stronger they’ll call me freedom just
like a wavin flag

when i get older i will be
stronger they’ll call me freedom just
like a waving flag
and then it goes back (x3)
ohhh ohhh ohhh ohhh

born to a throne
stronger than rome
but violent prone
poor people zone
but its my home
all i have known
where i got grown
streets we would roam

out of the darkness
i came the farthest
among the hardest survive
learn form these streets
it can be bleak
accept no defeet
surrender retreat
(so we struggling)
fighting to eat
(and we wondering)
when we will be free
so we patiently wait
for that faithful day
its not far away
but for now we say

when i get older i will be
stronger they’ll call me freedom just
like a waving flag
and then it goes back (3x)
ohhh ohhh ohhh ohhh

so many wars
settling scores
bring us promises
leaving us poor
i heard them say
love is the way
love is the answer
thats what they say

but look how they treat us
make us believers
we fight there battes
then they deceive us
try to control us
they couldn’t hold us

cause we just move forward
like buffalo soldiers
(but we strugglin)
fighting to eat
(and we wonderingg)
when we will be free
so we patiently wait
for that faithfully day
its not far away
but for now we say

when i get older i will be
stronger they’ll call me freedom just
like a waving flag
and then it goes back (3x)

and then it goes when i get older i will be
stronger they’ll call me freedom just
like a wavin flag
and then it goes back (x3)
ohhh ohhh ohhh

and everybody will be singing it
and you and i will be singing it
and we all will be singing it
wo wah wo ah wo ah

when i get older i will be
stronger they’ll call me freedom just
like a wavin flag
and then it goes back (x3)

and then it goes when i get older i will be stronger they’ll call me freedom just
like a wavin flag
and then it goes back (x3)
a oh a oh a oh
when i get older
when i get older
i will be

BANDERA FLAMEANDO
Cuando sea mayor, seré más fuerte
Me llamarán libertad, como una bandera que flamea

Cuando sea mayor, sere más fuerte
Me llamarán libertad, como una bandera que flamea
Y después vuelve, y vuelve…(3)

Nacido para el trono, más fuerte que Roma
Pero propenose a la violencia, lugar de gente pobre
Pero es mi casa, todo lo que he conocido
Cuando sea grande, las calles tomaremos
Pero fuera de la oscuridad, vengo de un lugar remoto
Soy un duro sobreviviente
Aprender de estas calles, puede ser duro
No se aceptan derrotas, imposible rendirse
Entonces nosotros luchamos, peleando por comer y
nos preguntamos cuándo seremos libres
Entonces pacientemente por los días esperados
No están tan lejos, entonces por ahora decimos

Cuando sea mayor, seré más fuerte
Me llamarán libertad, como una bandera que flamea que viene y que va, oh

Tantas guerras, traspasando barreras
Trayéndonos promesas, dejándonos pobres
Los escuché decir el amor es el camino
Pero mirá cómo nos tratan, nos hacen creyentes
Peleamos sus batallas, entonces ellos nos engañan
Tratan de controlarnos, no nos podrían retener
Porque nos movemos como soldados
Entonces nosotros luchamos, peleando por comer y
nos preguntamos cuándo seremos libres
Entonces pacientemente por los días esperados
No están tan lejos, entonces por ahora decimos

ohhh ohhh ohhh ohhh
Y todos estarán cantando
ohhh ohhh ohhh ohhh
Y todos estarán cantando
ohhh ohhh ohhh ohhh

Cuando sea mayor, seré más fuerte
Me llamarán libertad, como una bandera que flamea
Como una bandera que flamea, como una bandera que flamea
Bandera, bandera, como una bandera que flamea.

miércoles, 23 de junio de 2010

Editorial 6 de 2010 (con poesía de Julián Axat)

Lenguaje adulto, nada de erotismo como el lunes pasado, dejó dicho el jefe.
Puede tener razón, pero lo que no tiene es coherencia.
Después de pasar a saludarlo por su despacho el viernes pasado escuché una serie de palabrotas entre su empleada Campanita y él terribles, pero… es el jefe.
Pensé entonces, en las últimas noticias, cuarenta años atrás se separaban los Beatles, un 10 de abril se terminaba el sueño; de Messi que ya le encontraron la vuelta para frenarlo en el mundial… nada… no hay que hacer nada… mientras lo entrene Maradona y tenga la camiseta argentina no hay que hacer nada; un intendente de Coronel Arnold, ciudad santafecina, vendió la plaza del lugar para pagar los sueldos. Se justificó, por supuesto, sin licitación alguna. Recordar a los padres de Soledad Morales, que donaron 250 mil dólares de indemnización a un Hospital y que frente a la libertad de quien fuera condenado, su mamá Ada dijo con dolor que ella era una ciudadana que debía respetar las leyes.
Pero sin olvidar todo esto, recordar a un poeta ocupará esta editorial. Debido a que justo en un día como el de hoy, 12 de abril de aquellos años que duraron tanto, una eternidad… fueron siete pero tan largos… fue mucho tiempo y pasó de todo… secuestraron, torturaron, mataron, hicieron desaparecer a los muertos… hasta inventaron una guerra con el fin de eternizarse en el poder y que nadie los descubra… pero se equivocaron tanto, tanto… que se tuvieron que ir… no entendían nada, no se dieron cuenta que eran ellos los dinosaurios, que desde la literatura se les decía todo junto.
“Una revista que supera apenas la mediocridad general” Humor así se presentaba, para informar, reírse, juntó bronca, adoptó gustos y aprendió a ser crítica contra un dictadura que se llevo hijos, padres…
Sin embargo, el paso de tanto tiempo nos devuelve hoy hijos de aquellos padres que se llevaron ellos: uno, Juan Aiub, nos trajo hace tiempo un cuadernito "éxito" con los versos de su papá, aquél que nos enseñó a cuidar las cosas que queremos como si fueran un jardín, para que la maleza no nos tape.
Otro hijo es el creador de este espacio, el que le dio origen a Collar de Perlas. Que escribe, claro, que es poeta, sin dudas, que nos enseñó a embalsamar caricias. Que sueña igual que todo el mundo, aunque todos los años, un día como hoy, tenga que recordar con enorme tristeza que su vida un 12 de abril cambió para siempre. Y en una oportunidad su poesía describió uno de sus sueños, que dice así:

TODOS LOS AÑOS…

todos los años
ese día
a la misma hora
sueño
viajo al pasado
una hora exacta antes de que caigan
me veo a mi mismo de siete meses
en los brazos de mamá
desesperado
les cuento de su destino
hay que irse rápido les digo
quedan pocos minutos
no vacilan
no se inmutan
llegamos a discusiones acaloradas
no hay caso pienso
se quedan
antes de volver me entregan al
niño
cuidalo
y vuelvo con él en brazos
sin rescatarlos
ni siquiera de los sueños


Julián Axat, poeta y abogado, nació en La Plata el 3 de agosto de 1976.
Ana Inés Della Croce y Rodolfo Jorge Axat, los padres de Julián, militantes populares secuestrados el 12 de abril de 1977 en La Plata. Están desaparecidos.

RENE GADE 2

HOLLISTER
Asumía Fernando y se dedicaba a destruir lo poquísimo de bueno que había hecho Carlos. En aquel momento me fui a una quiebra devastadora. Con la venta del auto me alcanzó para dejar en casa 300 dólares escondidos en un libro, comprar un ticket aéreo y llegar a Estados Unidos con 100 dólares en el bolsillo.
Internet era demasiado nuevo para buscar Hollister, más aun teniendo en cuenta que el pueblito ni siquiera aparecía en los mapas de papel. Sentí que estaba comenzando un viaje a un lugar inexistente, un viaje a la nada.
Hollister no era pequeño, era insignificante. Una localidad agrícola aislada del mundo y en el medio de una árida geografía. Producían frutillas grandes como naranjas, repollos como pelotas de básquet. Todo a lo yanqui, todo sin gusto. La siesta y el tedio también eran gigantes.
Hollister no tenía taxi ni bondi ni vida nocturna. Lo más parecido a un hecho cultural era una cafetería con fotos de motoqueros y un cartelito que decía “Esta fue la casa de los Blue Angels”.
Dos meses largos como dos décadas. Yo vivía con Frank que había cumplido 92 años y era saludable como un toro. Por las tardes escuchábamos su tocadiscos Wincofon que solo funcionaba en 16. Mi tiempo transcurría como un reloj arena, pero roto. Cuando empecé a ver todo en color sepia, me di cuenta que estaba dentro de una película de terror, una película mala.
Estaba convencido que el silencio de las calles, siempre vacías, me había taponado la cabeza cuando una mañana me despertaron unos zumbidos estremecedores.
Con miedo, salí de la cama para espiar por las rendijas de la persiana. El pueblo estaba siendo invadido por Harley Davidsons. Me vestí rápido, corrí hacia el centro y en minutos llegué a la puerta de la parroquia. Afuera, el cura estaba bendiciendo motos y motoqueros. Le pregunté, que está pasando? Son las Harley, me dijo, vienen una vez por año. Y cuantas son? No sé, miles, varios miles.
Es muy impresionante ver mezclados Hippies viejos con Punks, Abogados y Millonarios. Todos ex–jóvenes motoqueros. Coleccionistas de “Harley” que se dan cita anual en Hollister… una cita a lo yanqui.
Si quieren ver joyas del motociclismo y los más exóticos modelos, en el desfile más alucinante de Harley Davidsons tienen que programarse para un viaje:
A la nada.

René Gadé

RENE GADE 1

HAITI
En el aeropuerto, cuando llegue a la cinta del equipaje, recibí la primera idea de Port au Prince Capital de Haití. Resultó ser un poco peor de lo que mi mala predisposición tenía organizado. Valijas gigantes, llenas de tesoros comprados en Miami, rodeadas por pasajeros, changarines, familiares y taxistas. Todos hablando y oliendo en Creolé o en Francés.
La ciudad aloja tres millones de habitantes en una pequeña bahía rodeada por montañas donde, al revés que cualquier país desarrollado, los más pobres están cerca del mar y los más ricos en las alturas. Los hoteles 5 estrellas ocupan la punta de cada elevación, como faros.
Desde allá arriba se apreciaba un panorama bellísimo. El agua turquesa del Caribe y las paredes verdes de la bahía separadas por una franja movediza de toldos y personas, entre el caserío.
Me recomendaron no subir a un taxi por ningún motivo; alquilar un auto tampoco; lo que se entiende como transporte público eran unas pick up desvencijadas e inclinadas hacia atrás por el peso de los pasajeros que viajan parados en la caja. La solución fue la renta permanente de una 4x4 manejada por su dueño.
Para recorrer los 5 kilómetros que separan la cima, de los barrios bajos, se necesita una hora. Porque a medida que se desciende, la lentitud del tránsito se acentúa hasta terminar en un amasijo de transeúntes y vehículos.
El chofer penetraba el gentío abriéndose paso lo más despacio posible. Pero ese “lo más despacio posible” estaba muy lejos de una velocidad aceptable para mi conciencia. Los atados que algunas mujeres transportaban sobre la cabeza se tambaleaban cuando las embestíamos suavemente. Me dió taquicardia, pensaba en los pies y en los tobillos. La muchedumbre, empujada, rebalsaba hacia los costados de la camioneta e iba quedando atrás sin protestar.
La 4x4 y mi taquicardia seguían avanzando. Cruzamos calles normales, otras calles menos normales y más pobres, seguíamos bajando. Por último atravesamos un mercado enorme y paupérrimo. Cada puesto era un pedazo de lona sobre el barro donde se vendían unos pocos vegetales. Eran miles de mini mini emprendedores.
Al final, llegamos a la costa. En un edificio desteñido por el salitre y la dejadez me encuentro con mi focal point, que no es otra cosa que una persona local con capacidad de hacer que los individuos a quienes tenés que ver, te reciban. Lograr que una reunión se concrete es un éxito rotundo, ahora, que se cumpla el horario previsto es un imposible. Siempre fueron dos horas de retraso y 10 minutos de explicaciones.
Por lo tanto mi primer regreso al hotel fue de noche, cosa que me habían remarcado debía evitar bajo todo concepto. Al atardecer ya hay que estar acá arriba! No se olvide! Mire que acá no hay policía, no hay gendarmería, no hay nada, solo existe LA GUARDIA PRESIDENCIAL. Por suerte la camioneta no se descompuso y el retorno desde la costa hasta la montaña pasó a ser una postal imborrable.
Era una noche sin viento. Mucha oscuridad. Para darse una idea, el 60 por ciento de la población no tiene energía eléctrica. Desde la orilla yo trataba de identificar las luces de los hoteles, allá arriba, pero delante de mí se interponía un telón a franjas gruesas, de color negro y naranja.
Las fogatas en el mercado iluminaban de anaranjado columnas de humo que subían en la noche. Las franjas se balanceaban a un compás que el mismísimo Reynolds hubiera envidiado. Entre los fuegos se veían sombritas negras que pasaban. Mañana tengo que cortar temprano, pensé.
Estaba terminando de desayunar cuando llego mi focal point a buscarme. Era una negra formada en Estados Unidos durante un exilio político obligado. Elegante y arreglada se quedó parada junto a la mesa, yo me levanté y le dije, porque no se toma un café mientras voy a mi cuarto a buscar el saco. Dijo, no gracias, prefiero acompañarte.
Cálculos y especulaciones de todo tipo me tomaron demasiados nanosegundos, ya estábamos caminando, esa simple frase estaba poniendo a prueba mi virilidad personal y el machismo argentino entero.
Una vez adentro (de la pieza) tenía en un plato de la balanza mi inquebrantable fidelidad cristiana y la estadística oficial sobre HIV, 1 de cada 4 haitianos tienen sida. En el otro plato de la báscula estaba ella, que no era linda pero era JOVEN. Era negra. Y me estaba besando.
Varios detalles no me cerraban, pero el disparador fue que su piel estaba fría y si bien racionalmente su carne era flexible, al tacto daba la sensación de tocar una cubierta de automovil. No es racismo, es tan solo una descripción subjetiva. Nuestra sociedad premia y valora las carnes firmes, pero en ese extremo, la situación era desalentadora. La fantasía de poseer una negra se iba como agua entre los dedos. Mejor vamos a la reunión, dije. No quisiera ser impuntual.
Al día siguiente me dijo: hoy hemos terminado temprano; quieres conocer el Palacio Presidencial? Acepté.
Era un edificio blanco, de estilo colonial, apenas grande. Entramos por un costado; me llamó la atención que la saludaran con respeto y que no me pidieran identificación alguna. Me conducía por escaleras secundarias, transitamos pasillos demasiado angostos, evidentemente me llevaba por un camino para nada oficial. Pienso que llegamos muy arriba, como a un tercer piso.
Una puertita pequeña, sin manija, se abrió sola. Entramos en un bunker y la puerta se cerró, pesadamente, detrás de mí. Una de las paredes estaba forrada con displays de las cámaras de seguridad y grabadoras de audio, en la otra, una estantería con cosas. Sobre la mesa había cuatro ametralladoras UZI y algunas pistolas. Sus propietarios eran 6 orangutanes enormes y negrísimos que estaban reclinados en sus sillas. Algunos me miraban de reojo otros de frente.

El más grandote y más negro, se paró. Mientras avanzaba a nuestro encuentro, ella murmuró “es el JEFE DE LA GUARDIA PRESIDENCIAL”. Tuve tiempo para evaluar su excelente traje y el resto de la indumentaria, carísima. El la saludó con un beso y en perfecto Inglés me dijo: Mi esposa me habló de usted! Mi reloj de arena se detuvo en la mitad.
No sé si fue por el escalofrió que recorría mi columna o por el torbellino que atravesaba mi cabeza, pero mi mano derecha se extendió hacia adelante. El gigantón lo interpretó como un saludo. Yo en cambio como un pedido de piedad. La mitad de mi cerebro hilvanaba una frase: “ella fue la que empezó primero” y la otra mitad evaluaba si esas serian mis primeras palabras o mis últimas palabras. El asunto es que traducida al Inglés la frase salió como: Nice to meet you.
Los tres iniciamos el recorrido del Palacio, me mostraron los lugares oficiales y el ceremonial. Cuando salí a la calle, dejé escapar el aire contenido durante las últimas horas y me sentí vivo. Quiero decir: Viviente.

Vuestro nuevo corresponsal
Irán Ilom
(nombre codificado, por razones de ética y de seguridad).

Editorial 4 de 2010

REAL O VIRTUAL…
Y... no sabemos. Alberto Rojo nos hizo un lío con la ciencia terrible y la presidente ni hablar, tanto que al fin de cuentas nosotros no sabemos si estamos en la 91.7 real o virtual, o si por el contrario y de acuerdo con el invitado podemos llegar a estar en dos sitios lejanos uno del otro al mismo tiempo.La ciencia es la ciencia y nuestra presidente ya nos informó acerca de la existencia de dos argentinas la real y la virtual… Bueno, un sistema tecnológico, basado en el empleo de ordenadores y otros dispositivos, cuyo fin es producir una apariencia de realidad que permita a sus integrantes tener una sensación de estar presente en ella.
Pero para eso se necesita un casco con un visor especial, hasta con trajes y guantes equipados con sensores diseñados para simular la percepción de distintos estímulos que intensifican la sensación de realidad. Así me ilustraron, me agrandé y dije:
-Un simulador de vuelo, por ejemplo.
-Claro, así…
-¿Y cuándo nos proveerán los trajes? Nadie contestó. Y eso que el lunes les conté que entre la dureza de la gomina brancato y el almidón del guardapolvo era Robocop por dentro y por fuera.
A no quejarse, en una Argentina pasan unas cosas y en la otra… bueno ya sabemos, la de ella y la de nosotros, son diferentes, ¿o será Alicia y no Cristina? Aunque… Alicia soñaba, ¿no es cierto? ¿Y Cristina no?
Aquella niña se había quedado dormida, después de su fantástico sueño despertó y le contó el sueño a su hermana -es decir a una relativa cantidad de argentinos- quien se queda debajo de un árbol, recordando la historia que relató Alicia… quizá hasta le crean a Cristina o Alicia, ya no sé a quién…
Esto de lo virtual es terrible, ya una vez relaté lo que me costaba chatear con mis hijas. Claro estaba dentro de un grupo de 376 personas, entonces cuando me decían "¿todo bien pa y vos?", había pasado una hora o más desde que pregunté "¿cómo estás Lu?" Y cuando me enojaba, me eliminaban, así de simple:e-li-mi-nar.
Vamos a ver, ¿qué nos puede pasar con tanta ciencia, tecnología e hijos?Nuestro invitado, Rojo parece explicar que en la altura, la fricción del aire sobre una pelota de fútbol tiene dos efectos notables, ¿pero de qué pelota habla?
“Un padre le dio una pelota de regalo al hijo, recordando el placer que sintió al recibir su primera pelota de parte de su padre. Una número cinco, oficial, de cuero. Ahora no era más de cuero, era de plástico. Pero era una pelota. El chico agradeció, desenvolvió la pelota y dijo: “…copado…”
Lo que los chicos dicen hoy en día cuando les gusta el regalo o no quieren lastimar al viejo. Después comenzó a girar la pelota en busca de alguna cosa.
-¿Cómo se enciende? Preguntó.
-¿Cómo, cómo es que se enciende? No se enciende…
El chico buscó dentro del papel de envolver.
-¿No tiene manual de instrucciones?
El padre se comenzó a desanimar y a pensar que los tiempos son otros… que los tiempos son decididamente otros.
-No precisa manual de instrucciones.
-¿Y qué hace?
-Se patea.
-Ah, entonces es una pelota.
-Claro que es una pelota.
-Una pelota, pelota, Lo que se dice una pelota.
-¿Qué pensabas que era?
-No, nada.
El chico agradeció, dijo “copado” de nuevo y, al poco tiempo, el padre lo vio frente al televisor, con la pelota nueva al lado, manejando los controles de un videogame. Algo llamado “monster ball” en que equipos de monstruitos se disputaban la posesión de una pelota en forma de blip electrónico en la pantalla al mismo tiempo que intentaban destruirse mutuamente. El chico era bueno jugando. Tenía coordinación y pensamiento rápido. ¡Le estaba ganando a la máquina!
El padre agarró la pelota nueva y ensayó un jueguito… consiguió equilibrar la pelota en el empeine, como antiguamente y llamó al chico.
-Hijo, mirá.
El chico dijo “copado” pero no desvió los ojos del televisor. El padre agarró la pelota con las manos y la olió, intentando recapturar mentalmente el olor del cuero. La pelota no olía a nada. Tal vez un manual de instrucciones fuese una buena idea. Pero en inglés… para que los chicos se interesen…
(Comedia de vida privada – Luis Fernando Verissimo)
Una pelota, la Argentina real y la virtual… los millones que hacen falta para celebrar los 200 años, cuando en realidad, un buen discurso, eso sí con muchos menos “yo” Cristina por favor, la delatan… téngalo presente, con recordar a Sarmiento con escuelas y universidades para hombres y mujeres, maestro de la palabra y guerrero político, abollado claro, por contradicciones como todo grande… debe ser casi suficiente… y casi gratis…

domingo, 20 de junio de 2010

Editorial 3 de 2010

La mujer de… (Marcelo Rubens Paiva)

No podía creer lo que veía, era otra… me preguntaba ¿es o no es? Colorada, como encendida… pero era ella, estaba seguro… la mujer de Pelai del barrio Ministerio como le gusta decir a Marianito.
Bueno… no tiene nada de malo. Hoy en día todo el mundo tiene el color de pelo que quiere, y otras cosas también… no solo por el color también el tamaño… entonces ¿por qué asombrarme?
La llamé y se dio vuelta, me reconoció y nos saludamos:
-Estás distinta, casi no te reconozco…
-Y sí, hice unos cambios…
-¿Y Pelai?
- Bueno, ahí está; su trabajo, el club de sus amores, los chicos… Ah! tengo algo muy bueno para vos, creo que lo tengo acá en la cartera…
Me da un papel arrugado con un título que dice “La mujer de…”, lo guardé, aunque no resistí y comencé a leer.
"La mujer de 14 es adolescente. Enamorada de los padres, tíos y abuelos. Del perro, de los profesores y amigas, del creo y del jardín, de la almohada suave, del helado de frutilla y el esmalte rosa.
La mujer de 18 ya no está enamorada del chico de su escuela. Muy pendejo. Le gusta beber y bailar y está muerta por un guitarrista. Va a todos los shows de la banda de él y se sabe todas las letras. Pero el músico, siempre borracho, se acuesta con ella y se duerme. También se acuesta con otras. Nadie es de nadie. Ella se pregunta si con las otras es más cariñoso. Usa esmalte púrpura.
La mujer de 19 se siente muy atraída por el socio de su padre, cosa que la deja perpleja porque lo conoce desde que era pequeña. Siente atracción especial por muchos hombres, quiere provocarlos, seducirlos sin culpa, pero no es pasión, es atracción por la vida y mucho placer por la reacción que provoca en los hombres. Ella ama la pasión y el poder.
La mujer de 21 besa a todo el mundo. Seduce a todo el mundo. Quiere viajar con todo el mundo, conocer todas las tribus, bailar todas las músicas, comer todas las comidas, beber. Tiene sexo con el socio del padre que tiene 30 años más que ella. Pasa días escuchando a Billie Holiday.
A los 22, su hobbie es provocarlo cuando él y su mujer comen en la casa de sus padres. Y ¿qué hace? Absolutamente nada. No habla. No mira. No come. Como una niña enojada. Lo deja porque él la llama nena malcriada.
La mujer de 23 descubre que siente por un arquitecto adulto más de lo que sintió nunca por todos los hombres anteriores. Está insegura, piensa que es tonta. Sale con él. Se vuelve celosa. Sufre todo el tiempo. Cree que lo ama, pero ¿eso es amor? Duda…
Después de este amor intenso, con idas y vueltas, la mujer de 26 se separa. Nadie le dijo que el amor trae dolor. Se queda sola un tiempo. Sale con amigas. Va a bailar. Está apasionada por su trabajo. Ahora es su prioridad. A los 27 vuelve con el arquitecto pero no descarta otros. Especialmente el hermano de su jefe, un cliente casado, el ex de una amiga y el amigo de 18 años de su hermana más chica.
La mujer de 28 se apasiona por un tipo que hace cine, con el que tiene afinidad y química. Se pelea con los otros. Asciende en el trabajo. Gana más. Sale con el cineasta. El tipo hizo tres cortos y está por filmar su primer largo que también escribió. La mujer de 29 por primera vez en la vida encontró un tipo con el que quiere casarse, el cineasta, y está insegura. Por eso vuelve a salir con el arquitecto. Sale con los dos. En vísperas de Navidad se pelea con ambos y viaja sola a Bahía con una pila de libros.
A la mujer de 30 ya no le apasiona nadie. Quiere terminar la maestría y pasar un tiempo en Barcelona. No quiere casarse ni tener hijos.
La mujer de 31 se cansa de ser extranjera y regresa a Brasil. Vuelve sola, alquila un departamento. Sabe que lo ideal es un tipo bueno, que le dé seguridad y que sea buen padre. Lo llama al arquitecto, que largó la arquitectura y ahora trabaja con el padre. Lo seduce, él se deja llevar. Los amigos le recriminan ¿de nuevo…? Nada oficial, él se muda con ella.
La mujer de 32 muere por su hijo que acaba de nacer. Lo más bonito del mundo. Descubre que casarse es difícil. Es insistir en un proyecto contra el que golpean mil tentaciones. No va al estreno de la película de su ex.
La mujer de 33 está muy bien en el trabajo, tiene niñera y el marido es tan dedicado al nene que hasta le da celos. No tiene buena vida sexual.
La mujer de 34 se enamora de su nuevo hijo, el segundo. Una belleza. La pareja compra un plasma enorme con un terrible equipo de sonido. Invitan a amigos. El cocina, sabe de vinos. Piensan en construir una pileta para los niños en el jardín.
La mujer de 36 se pregunta si todavía quiere a su marido buenito. Sueña con otros hombres, sueños eróticos, locos y sin sentido. La mujer de 37 tiene una vida rutinaria: casa, trabajo, hijos, marido, gimnasio, padres enfermos y curso de mitología. Comienza a ir sola al cine por la tarde. Enloquece cuando se ve en el personaje de la segunda película de su ex el cineasta. ¡La trama es sobre ella! El tampoco la olvidó. Sale del cine y lo llama. Para su sorpresa él atiende y conserva la voz ronca que le hace acelerar el corazón. Le dice que quiere verla ahora. En lugar de ir, decide hacer terapia.
La mujer de 40 despierta una tarde lluvia y encuentra al marido en la sala con tres valijas: “Tenemos que hablar” dice él y le cuenta que está enamorado de una azafata de TAM y que se muda con ella. Mientras él relata los motivos, ella piensa: ¿por qué no de Bristish o Air France?.
La mujer de 42 sale con amigas a beber y bailar. Va a boliches de gente joven, sale con pendejos: un escritor bisexual de 25, un DJ danés todo tatuado, un judío que toca salsa en un bar cubano.
A los 43 reencuentra al amante cineasta en un café. Él va camino a Cannes con su tercer film. Toman 4 cafés. Hablan de las películas de la década. Al final, él le pregunta por qué lo dejó. Piden la cuenta y van a un hotel. Dos días después se van a Cannes. Ella se divierte con el glamour de la ciudad, con la atención que les dan, y con el charme y la gentileza de su ex. Pero su tercer largo le parece una porquería, a tal punto que se toma el avión de regreso a Brasil.
El cineasta sonríe cuando le entregan la nota junto con un champagne y flores. Ella le pide disculpas, afirma que ése no es su mundo, que le encantó la invitación, que Francia es lo más, pero que regresa a su vida y sus hijos. Él sabe que no le gustó la película. Regresa a Brasil y va directo a la casa de la mujer de 43 que ama. Abre la puerta un nene en un skate seguido de otro disfrazado de Batman. Ella no sabe qué decir y él le da una pila de recortes de todo el mundo donde destrozan su tercera película. Ella se ríe y le presenta a sus hijos. La mesa está puesta. La mujer de 43 mira al cineasta de tres largos y le dice que coma con ellos…"

Sorprendido… debido a que casi era su edad, le pregunté:
-Y todo esto te pasó?
-No, por qué?
-Es que estás tan distinta?
-Es el pelo nada más, no te preocupes… a propósito: ¿cuándo viene Collar a cenar?; avísame y preparo algo… si. Me voy que estoy apurada.
-Bueno nos llamamos.
Y ahí me quedé…

Editorial 2 de 2010

Dijo… “al lector no hay que soltarlo”
Parece que ha cumplido y en exceso su premisa, ansioso por tender un puente entre ciertas personas y convencer que la gente sobre la que escribe -en apariencia tan distante de los lectores- tienen mucho que ver con ellos …y eso es lo que me gusta… contaba hace poco tiempo John Carlin, autor de “El factor humano” su libro sobre los esfuerzos que realizó Nelson Mandela por buscar la paz social en Sudáfrica.
Su semejanza con Ryszard Kapuscinski es notable, por ejemplo estuvo en Malasia y Bangladesh para escribir una crónica sobre una minoría musulmana en Birmania (Myanmar), gente que nadie conoce y que para él es la más triste del mundo. Esclavizada y perseguida por un implacable régimen militar huyen a un país terriblemente pobre como Bangladesh y de allí en unos barcos recorren 1.500km para intentar llegar a Malasia… y unos llegan, a otros los atrapan los soldados y van presos, les pegan o los abandonan en alta mar en barcos sin motor…
Le preguntaron cómo hacía para que el lector se interese por semejante tema. y el contó que era consciente de la dificultad, un texto sobre gente de la que nunca ha oído hablar, pero que sentía una gran responsabilidad respecto de quienes le contaron sus historias.
Explicó que en una oportunidad preguntó a uno de ellos por qué no luchaban contra el régimen en Birmania y le contestaron “…esta es nuestra lucha, hablar con usted para que el mundo sepa lo que ocurre…” nunca le habían dado una explicación tan simple de cuál era la razón profunda de su trabajo.
Apenas un granito de arena, pero cuando más granitos haya mejor… un granito para considerar a los grandes personajes de la historia, aquellos que unen, porque los políticos más comunes generan enfrentamientos, los grandes de veras son los que concilian lo que parecía irreconciliable.
Mandela es el más claro de los ejemplos, tender un puente entre blancos y negros después de 27 años de cárcel, lo que significó el principio del fin para el régimen del apartheid.
Cuando le preguntan por Kapuscinski dice que hizo un trabajo literario, tuvo una visión muy amplia de los hechos que narró, dio una sensación de que en el periodismo no hay límites cuando se sabe traspasarlos “…pero su mayor virtud es que da gusto leerlo…”, es cierto, la historia que alguien tiene puede ser maravillosa, sin embargo, si no se escribe de manera que permita agarrar al lector y no soltarlo hasta el final, no tiene sentido alguno.
Ambos recorrieron Africa, Kapu durante treinta años, Carlin quizá un poco menos. Un continente con 55 países, todo un océano, un planeta aparte y su conclusión: sólo por una convención reduccionista, por comodidad, decimos AFRICA. En la realidad salvo por el nombre geofráfico, "África no existe”
Él tuvo una historia importante y valiosa y supo contarla claro… este jueves 11 se cumplen 20 años desde que Nelson Mandela recuperó su libertad, para ser luego con enorme justicia Premio Nobel de la Paz.

Editorial 1 de 2010

2010… por fin, aunque nada que ver con la película

¡Qué alegría, qué encuentro…! Todo el mes en una dulce espera, ansiosos… Cada una de las parejas preguntaron durante este tiempo alguna vez… ¿se puede saber en qué pensás…? Y la misma respuesta …nada, nada, no te preocupes… y por dentro la pregunta ¿y en qué voy a pensar…? en Collar, los lunes de 8 a 9, por la 91.7 y después a lo del Negro… a reírnos, a ser felices… ¿y el programa?, ¿cómo salió? ¿Y el que viene?... Y así todos los lunes.
Sucedió al fin, un llamado por acá, un mail por allá… el lunes en lo del soldado… asadito, comenzaba Collar…, porque había que ir a charlar sobre el programa, otra vez juntos, los tres y se sumó ahora con menos inconvenientes Anónimo que vuelve con todo… 8 y 30 hs. del histórico lunes 25 y allí nos encontramos puntuales…
La reunión se realizaba en la casa del recién ascendido a general Sr. Negro con su agregado Vetuka y entonces con el horario no se jode… entramos, nos abrazamos al grito de ¡volvió Collar y …estamos vivos…! que se festeja también… y por supuesto vino el primer brindis, aunque cortito, debido a que una leve sospecha existía porque sobre una mesita que se encontraba antes del quincho en un lugar fresco y con cuatro sillitas enfrentadas hacia ella se encontraba apoyada una notebook…
Así fue que, luego del brindis -el primero del resto- el General nos invitó a sentarnos frente a la compu… una vez allí él ocupó el rol pedagógico conduciendo el ratón con pasmosa habilidad, a su lado Anónimo, detrás con las tizas en la mano Marianito y yo…
La clase fue “hoy inauguración del blog de Collar” y nuestra introducción al mismo… para esto tuvo una artillería -todo muy castrense por supuesto- de ingresos y egresos que nos confundieron a todos, pero luego recordó como es su costumbre… todo.
Y allí comenzó la verdadera clase.
Entonces quedamos registrados, cada uno con su cuenta y lo cierto es que él ahora puede ingresar a nuestros correos sin problema alguno debido a que conoce cada una de nuestras claves, desde que, en momento alguno cuando las solicitaba desviaba su marida hacia el costado… como un buen empleado de banco por ejemplo… en síntesis puede escribir cualquier barbaridad en el blog a nuestro nombre… aunque lo conocemos incapaz de hacer algo semejante.
Y además… Anónimo entendió y el profe por supuesto, pero la última fila conformada por Marianito Caballasca y Cirilo Tamayo (quien habla), nada de nada, hoy a una semana todavía ninguno de los dos pudo ingresar, una vergüenza.
Después vino lo mejor, más vino, cerveza, champagne, asadito, provoleta, chinchulines, ensaladas y helado… todo y mas champagne… hasta que alguien nombró a Alfonsín… y ustedes saben qué pasa, pero entre nosotros nada más que un intercambio de opiniones, eso es todo.
Y Collar fundido en un gran abrazo para comenzar el año.
Algo para aclarar acerca de mi amistad con Marianito tiene que ver con que todos los lunes desde hace cerca de dos años… comemos carne de cerdo, luego… en nuestro intercambio epistolar nos despedimos con ¡abrazo!, ¡lo extrañé! o ¡lo quiero mucho…! pienso que conviene decirle a los oyentes que no somos gays -que no tendría nada de malo- pero como ahora parece que la carne de cerdo es afrodisíaca y puede ser… si es como dice la presidente, porque ya no se la ve tan crispada, ¿no?
¿Y el programa de hoy? Bien, sin el Sr. Negro, nos prometimos hacer algo tranquilo, espontáneo, quizá recordar el reciente fallecimiento de Salinger quien fuera invitado de Collar en el último año, un confuso 2009 por la pérdida de dos referentes de la etapa fundacional de la democracia y por qué no, a encontrar ciertas semejanzas entre aquellos padecimientos de la libertad y el estado actual de la justicia, la equidad social, la credibilidad de las instituciones y otras para transformar un País en Nación… también contarles nuestras lecturas de verano o anécdotas, y hasta quizás un mail donde Marianito me dice que se emocionó al recordarme a través de un libro que hoy ya es película y parece candidata a un OSCAR.